
23 Ene Por qué ser copywriter cambió mi vida y cómo el copywriting me ayudó profesionalmente
Hoy te voy a hablar desde el corazón ?.
Soy tan atípica que hago las reflexiones que todo el mundo hace a final de año cuando empieza el nuevo.
Esta vez, quiero compartirlas contigo y te voy a contar una historia: mi historia.
Hay una frase que resume mi 2019 muy, muy bien: Las letras han dado un giro de 180 grados a mi vida.
Literalmente, vivir de escribir me ha cambiado la vida.
Hoy voy a dejarme de tecnicismos, de teorías y de consejos.
Lo único que quiero es transmitirte un mensaje y argumentarte por qué todo lo que me ha pasado a mí, también puede pasarte a ti.
Porque, sí, ser copywriter me ha cambiado la vida y el copywriting me ha ayudado profesionalmente a posicionarme donde siempre he querido estar.
Sigue leyendo y te cuento 😉
Índice
Ser copywriter empieza por «e» de escribir
Si te has pasado alguna vez por mi página de «Sobre mí«, te va a sonar todo lo que te cuento ahora.
Podría empezar por el «érase una vez…» de todos los cuentos de niños, pero hasta para eso soy atípica.
Siempre he querido escribir.
Desde que fui al colegio por primera vez y me enseñaron a coger un lápiz, nunca lo he soltado.
Siempre he ido por la vida con un cuaderno y un lápiz para escribirlo todo.
Cuando tenía 5 años, me hicieron la pregunta típica que le hacen a todos los niños pequeños: «¿qué quieres ser mayor?».
Yo lo tenía claro porque, la verdad, siempre he tenido las ideas bastante nítidas de hacia dónde debía ir.
Mi respuesta fue rápida y no me anduve con muchos rodeos: «quiero ser periodista deportivo para defender al Atlético de Madrid de todos«. Sí, Raquelita quería dejar de ver sufrir a su padre por su Atleti y empezar a mostrarle al mundo que su equipo era el mejor en el campo y fuera del campo.
Después descubrí que ser del Atleti era un acto de fé y que todos sus seguidores nunca moriría de un infarto al corazón. Si eres forofo de este equipo, me estás entendiendo cien por cien, pero esto es otra historia ?.
El «erre que erre» de vivir de escribir
La cuestión es que, desde entonces, siempre tuve en mente hacer todo lo que estuviera en mi mano para ser periodista y escribir.
Porque eso es lo que quería, escribir.
Mientras tanto, yo seguía con mi bolígrafo anotándolo todo.
Llegó el momento de la verdad y no pude hacer Periodismo de primeras. No me dio la nota para entrar en la carrera, por muy poquito, y tuve que hacer un pequeño alto en el camino y coger un atajo para llegar hasta allí.
Estudié Bilioteconomía y Documentación para poder pasar después a Periodismo. Y así sucedió.
Biblioteconomía me enseñó la importancia de investigar, documentar y salvaguardar todo lo que se cuenta para no mentir y valorar la información bajo datos objetivos, entre otras muchas cosas.
Gracias a ella, llegué a Periodismo. Lo conseguí y empecé a trabajar en ello.
La televisión nunca me llamó la atención, me molaba más aquello de estar zascandileando por la calle, correr a la redacción y sentarme en el ordenador. O salir al exterior y, después, contarlo en la radio.
Eso sí que me flipaba.
Pero ¿ves? Escribir siempre estaba detrás.
El tiempo pasaba, el trabajo era inestable y, por suerte o por desgracia, no llegaba nunca ese empleo que me diera el privilegio de ganarme la vida escribiendo.
Como todo, al final sientes que eso era un sueño y que las preguntas del tipo «¿periodista? ¿con eso vas a ganarte la vida?«, te van minando y terminas creyendo que es imposible.
Así que busqué un plan B para poder simplemente vivir.
Es una pena tener claro lo que quieres hacer y que no lo consigas porque no sabes cómo llegar hasta allí.
Empecé a trabajar en bibliotecas, estuve varios años, incluso, en la Biblioteca Nacional.
Todo un carrerón.
Pero yo quería escribir, por eso nunca estaba conforme con lo que hacía, aunque no me disgustara.
Sacando a relucir mi vena visionaria, empecé a reciclarme profesionalmente antes de que me cogiera la crisis y me asfixiara como a todos. Supongo que lo hice por esa inconformidad que tenía dentro y que no sabía por dónde sacar.
Y comencé a meter la cabeza en el marketing online.
Todo fue una causalidad, algunas bandas de música metal me dieron la oportunidad de gestionar sus redes sociales y me vi sin querer metida en un mundo que ni conocía ni controlaba.
Sin darme cuenta se me estaba abriendo el camino hacia copywiting.
Dejé el trabajo en la Biblioteca Nacional, me lié la manta a la cabeza y me fui a Finlandia a formarme, aprender inglés de una vez, y a disfrutar de la vida pasando de la super crisis económica.
Esto daría para un bestsellers, pero no me voy a enredar en ello ahora ?.
Así empecé a trabajar en marketing online, gestionar redes sociales y, al poco tiempo, me convertí en Social Media Manager.
Eso sí, ya había eliminado de mi mente vivir de escribir.
Para mí, era ya un imposible que arrastraba desde años anteriores y prácticamente ya ni se me pasaba por la cabeza.
Me seguía gustando lo que hacía, pero todavía me faltaba algo.
¿Te suena todo esto?
Y, por fin, llegué a ser copywriter
Después de una temporada larga viviendo en Finlandia, volví a España por infinitas razones (como esto no es un programa del corazón, me lo guardo para mí) ?.
Nada más llegar y con el pedradón de la crisis en España, encontré trabajo muy pronto.
Nadie se lo creía.
Era el trabajo al que aspiraba todo el mundo y más en esos meses tan asfixiantes: indefinido, con buen sueldo, siendo Social Media Manager y llevando la comunicación de la empresa.
Era la envidia de todos.
Empecé a trabajar allí y pronto me di cuenta de que ese no era mi sitio.
Pasé varios años en esa empresa, el trabajo cada vez era más tóxico y me llegó a afectar a la salud.
Así que no me quedó más remedio que salir de allí sin paro, sin indemnización y sin trabajo.
Era ya mi salud o ellos.
Y, en esa tesitura, la elección está clara: mi salud ante todo.
Estuve demasiado tiempo pensando en «lo que debía hacer» y no en «lo que quería hacer«.
A día de hoy, me he preguntado muchas veces por qué aguanté tanto en un trabajo que me minó a nivel profesional y personal porque, sí, llegué a pensar que ni viviría de escribir nunca ni serviría para ello.
Supongo que fueron los miedos a pegarle una patada en el culo a aquello que nos han impuesto como lo mejor que te puede pasar a nivel laboral.
Tragar carros y carretas, pero con un trabajo indefinido y medio bien pagado.
Estoy segura de que esto ha resonado en tu cabeza más de una vez.
Por suerte y antes de dejar ese infierno, yo ya estaba dándole otra vuelta de tuerca a mi vida. Y entré en un Master de Marketing Online para reciclarme y actualizar todo el conocimiento que ya tenía.
Y… ¡Allí descubrí el bendito copywriting!
Comencé a ir a eventos de marketing online y a participar como Community Manager Oficial de muchos de ellos.
Empecé a escuchar a gurús de todas las áreas hasta que un día oí a un chavalillo de Cádiz que sabía mucho sobre Copy. Contó su historia y me sentí tan identificada que le empecé a seguir.
Era Javi Pastor.
Flipaba cada día más con él, lo que movía y el mundo que estaba abriendo ante mis ojos sin darme cuenta.
Puso en marcha un training gratuito para explicar qué era eso de ser copywriter, me apunté, me volvió loca y pensé…
¡Puedo vivir de escribir!
Y no sabes lo que es ser consciente, a ciencia cierta, de que después de años y años has encontrado el camino que llevabas buscando desde que eras una enana.
Cómo el copywriting me ayudó profesionalmente (y personalmente)
Se inició el training «Soy Copywriter» de Javi y con él mi flipadura por esta profesión.
En la primera clase ya me quedé alucinada porque era como si yo contara la historia y él me demostró que si quería escribir y ganarme la vida con ello, era posible.
Imagínate a Raquelita con los ojos como el emoji este ?.
En la segunda clase me enseñó un sistema con el que podía escribir textos de venta sin tener experiencia en esto del copywriting. Y, según lo contaba él, parecía todo tan sencillo.
Siguiendo sus consejos, escribí mis primeros textos como Copy.
Y Raquelita estaba en éxtasis máximo.
En la tercera clase, aprendí a dar los primeros pasos para encontrar clientes.
En la cuarta clase ya había tomado la decisión. Quería ser copywriter de todas, todas.
Es más, antes de la cuarta clase del training ya había entrado en su programa «Adopta un Copywriter«.
Lo tenía claro, Javi no era un vendehúmos más y me iba a enseñar a vivir de escribir por fin y de verdad.
«Soy Copywriter» no fue el training gratuito típico de «te pongo la zanahoria delante para que piques y así me compres el curso que viene después«. Fue un entrenamiento bien productivo.
En él escribí mi primer email de venta y a puerta fría dirigido a un cliente que me llamaba mucho la atención.
Había superado la primera barrera. Sin ser copywriter aún ya había escrito mi primer texto de venta y había contactado con mi primer posible cliente.
Entré en su programa «Adopta un Copywriter» y aprendí todo de esta profesión.
Mucha gente me ha preguntado si es rentable apuntarse al programa de Javi Pastor.
La respuesta es rotunda: sí.
Cuando me inscribí en el programa de Javi, yo también tenía mis dudas. Estaba en una situación muy complicada. Recuerda que me acabada de ir del curro este tan tóxico que te comentaba antes: sin trabajo, sin paro, viviendo de mis ahorros y sin saber cuándo encontraría trabajo.
Pero tuve algo claro y es que quería vivir de escribir sí o sí.
Javi me dio mucha confianza y, entre tú y yo, no me defraudó.
¿Qué aprendí en «Adopta un Copywriter?
Es común apuntarse a un curso y tener dudas.
¿Me servirá de algo de verdad? ¿Me será rentable la inversión? ¿Perderé el tiempo y el dinero?
No te voy a engañar, yo pensé en todo esto, sobre todo, por la situación que estaba pasando.
Entré en el programa y en seguida me di cuenta de que me iba a ser de utilidad, porque Javi no te explica solo qué es el copywriting, te da cuatro formularios y ya está.
Javi te enseña a trabajar. Eso es lo que más me ha marcado, que aprendí a trabajar de forma práctica y activa.
Es fácil aprender las fórmulas del copywriting, las estructuras de los textos y cómo escribirlos, pero no es tan sencillo aprender todo eso y ponerte a trabajar.
Y con trabajar me refiero a:
- Saber gestionar las reuniones y los clientes.
- Aprender a buscarlos y encontrarlos.
- Hacer presupuestos en base a datos que nadie te explica.
- Organizarte para no perder el tiempo ni trabajar 16 horas al día.
- Poner en marcha un servicio de consultoría, redactar lead magnets y poner todo en práctica en tu web.
En definitiva, aprendes a ser copywriter desde el principio hasta el final.
Te conviertes sin darte cuenta en un profesional desde cero y terminas con la confianza de saber que lo vas a conseguir.
Y si te da una pájara, como yo digo, ahí tienes a todos tus compis, tutores y al propio Javi en Slack para contarles tus penas y que te ayuden a salir de la crisis existencial ;).
La comunidad que hay detrás es impresionante.
Voy a decir algo que parece muy típico, pero es que es una realidad: somos una gran familia que se ayuda siempre.
Puedo decirte, con la boca bien grande, que he conseguido tener al lado a algo más que simples compañeros y estoy fe-liz.
Además, te enfrentas todo el tiempo con clientes reales. Durante el programa, para hacer las prácticas de cada módulo, y al final del programa, porque tienes la posibilidad de hacer unas prácticas no obligatorias con las que aprendes aún más a trabajar como copy.
Las prácticas a mí me trajeron mucho bueno:
Primero, confianza en mí misma porque la había perdido.
Segundo, me llevó a escribir un post en el blog de Javi Pastor. Algo que nunca me imaginé que haría ni conseguiría después de todo lo que había vivido.
Pero esto te lo contaré otro día ?.
Cuando terminas «Adopta un Copywriter«, solo tienes que preocuparte por trabajar porque todo lo demás ya te lo han enseñado.
No te voy a mentir.
También tienes que poner de tu parte.
Javi no hace milagros y si no pones todo de ti para absorber toda la información que te da, la pones en práctica y te matas por buscar clientes, es difícil que lo consigas.
El trabajo no cae del cielo.
Sí puedo asegurarte que Javi pone en tus manos todo lo que necesitas para ser copywriter, en ti queda saber aprovecharlo.
En mi caso, a los tres meses de terminar el programa ya estaba haciendo entrevistas y contactando con clientes y, a los tres meses y medio aproximadamente, ya tenía un cliente recurrente al mes.
A partir de ahí, todo fue fluyendo y ese mismo mes tuve al segundo y así hasta hoy.
Cómo me ayudó el copywriting a todos los niveles
La verdad es que el copywriting ha sido mi bote salvavidas.
Escribir es mi vía de escape.
Por eso siempre digo que, mientras que para algunos escribir es una tortura inmensa, para mí es un rato de placer.
Sí, soy una friki de la escritura y orgullosa de serlo.
Encontrar el camino para vivir de escribir me ha supuesto un alivio personal y profesional.
Personal, porque he recuperado la seguridad que había perdido y he empezado a ser consciente de que sirvo para esto y me gusta.
Profesional, obviamente, porque he encontrado la forma de vivir de lo que me apasiona y de lo que siempre quise desde que cogí ese primer lápiz en el cole.
Aunar todo esto a todos los niveles me ha traído a una satisfacción brutal.
Sé que, al ser Freelance, mi camino será más complicado y que es más relajado trabajar para una empresa que estar buscándote el pan todos los días, pero no lo cambiaría por nada.
El copywriting me ha devuelto la sonrisa al despertar, cada día y cada hora.
Así que, si alguna vez has escuchado la historia de Javi y no sabías si creer en él o no, ya tienes aquí a otra loca que descubrió el copywriting, apostó por él para vivir de escribir y lo está consiguiendo.
Puedes entender todo lo que te cuento entrando en el curso «Soy Copywriter» de Javi Pastor. Él te ayudará a decidir si esto es para ti o no lo es.
Si siempre has querido vivir de esto y no encontrabas la forma, como yo.
Habías tirado la toalla, pero siempre te quedaron las ganas de darle a la tecla.
Si escribir es tu vida y quieres ayudar a los demás a expresar con palabras aquello que ofrecen.
Ser copywriter es lo tuyo.
Después de escribir «La Historia Interminable» by Raquelita, dime en comentarios si te habías planteado todo esto, te habías sentido como yo alguna vez o si tienes dudas sobre el entrenamiento o el curso de Javi y te contesto con total sinceridad.
Las letras han dado un giro de 180 grados a mi vida, por fin, ¿quieres darle la vuelta a la tuya?
¡Te leo!
Te interesa:
Miren pérez
Publicado en 22:49h, 15 marzoHola Raquel, soy Miren alguna vez hemos coincidido en algún top ten ( tu siempre antes ). Me ha sorprendido tu historia tanto, y estoy tan identificada contigo…. que es difícil no apreciarte…
yo estoy justo en proceso de reinvencion por causas médicas, licenciada en Filología Arabe y en Documentación, habló francés y estoy con inglés, ahora con Master .. mi sueño. Estrategia de contenidos-customer experience-….. veremos.
Gracias por contar tu camino para inspirar u dar ganas de seguir cuando se agotan, que, a veces, pasa. Un abrazo
Raquel Martín.SM
Publicado en 17:55h, 18 marzo¡Hola Miren!
Claro que sé quién eres, nos hemos «visto» en un montón de eventos online. 😉 Me alegro mucho de que te haya gustado el post y te animo a luchar por lo que quieres hacer de verdad. ¡Seguimos en contacto! Mucho ánimo y dale duro.
Un besote,
Raquel
Yenny
Publicado en 16:45h, 20 abrilHola Raquel, me gustó mucho tu historia.. bueno yo te cuento, no es que me sienta identificada como que escribir sea mi hobby o mi escape, de hecho nunca lo pensé, pero vi un video de YouTube donde hablaban al respecto y de que puedes trabajar independientemente e incluso tener altos ingresos, y puedes trabajar desde cualquier lugar. Evidentemente esos son factores que a todos nos gusta escuchar, pero en mi caso no termino de apuntarme a un curso para aprenderlo profesionalmente porque como te comento jamás me vi escribiendo, no considero que sea algo que me guste al punto de trabajar entonces me preocupa cuando lleguen esos momentos en que no tengas ideas, y donde “la pasión” es lo que haga que salgas adelante. No se si tengo eso, quisiera porque la verdad que si me gustaría hacer algo que me de libertad, una profesión que esté demandada en el mundo, algo que también vaya a la vanguardia dado los cambios que estamos viendo a nivel global. Bueno y por ese lado pienso que una profesión podría ser el Copywriting. Entonces quería preguntarte has conocido a alguien que pensara que escribir no era lo suyo, que nunca vio escribir como un hobby o una profesión, y que se formó y ahora le va bien con ese emprendimiento?
Un gran saludo
Yenny
Raquel Martín.SM
Publicado en 18:18h, 25 abril¡Hola Yenny!
Muchas gracias por pasarte por el blog y dejarme tu comentario. 😉
Respecto a la pregunta que me haces… sí, conozco gente que tampoco es Cervantes y se dedica al copywriting como profesión. Pero, yo siempre digo que, por ejemplo, no te gusta escribir es mejor no dedicarte a esto.
¿Por qué? Pues porque estarás trabajando todos los días en algo que no te gusta y eso a la larga te quema.
Si no te disgusta, puedes intentarlo y ser copywriter sin que tengas la capacidad de escribir una novela. El copy se aprende y, pese a los que la gente cree, no es un trabajo creativo 100%. Tiene más de metodología que de creatividad. 😉
Espero que te sirva mi respuesta.
Un saludo,
Raquel.
Guadalupe
Publicado en 18:56h, 17 septiembreHola, me siento bastante identificada contigo. Mi carrera frustrada es Filiogia Hispánica, pero por otras causas acabe estudiando derecho. No he ejercido nunca ni he trabajado nunca en nada relacionado con esta carrera. He desempeñado varios trabajos con eficacia en campos de la gestión administrativa y de instituciones, pero no me siento llena, me gusta ser libre y poder organizar mi tiempo. No estar en una oficina de 8 a 3 de lunes a viernes. Me gustaría saber como empezar en este mundo, como aprender esta profesión y sobre todo si hay salida profesional. Muchas gracias por tu historia, me has abierto un nuevo campo que quiero descubrir. Saludos cordiales.
Raquel Martín.SM
Publicado en 12:13h, 29 diciembreHola Guadalupe, muchas gracias por pasarte por aquí y dejarme tu comentario. Como te puedes imaginar, yo te aconsejaría que te tiraras en plancha si lo tienes claro. Desde luego, se puede aprender desde cero (yo soy un ejemplo de ello), poco a poco y si te lo enseñan bien y, por supuesto, tiene salida profesional. Eso sí, nadie te regala nada. Cuando aprendes cómo funciona la profesión, tienes que empezar a ponerle muchas ganas y esfuerzos en encontrar clientes y mantenerlos, pero yo iría paso por paso. 😉
Un abrazo enorme,
Raquel.